Buenos días a todos.
Las semanas van avanzando inexorablemente hacia el calor y el veranito.
Los que tengan en sus previsiones ponerse en forma para esas fechas, como cada año, que no tarden en empezar, que luego siempre tienen temor a hacer el ridículo.
Y ese es precisamente el tema de esta semana. Hacer el ridículo.
Cuando creemos hacerlo, como lo hacemos y que es lo que sentimos.
Como en todo en la vida, hay auténticos profesionales de hacer el ridículo y puedes encontrarlos en cualquier parte, nadie se libra desde familiares y amigos a grandes personajes de la farándula y la política. Curiosamente los que deben estar más preparados suelen ser los que más hacen el ridículo.
Hacer el ridículo nos genera ansiedad, vergüenza, nerviosismo.
En ocasiones ese ridículo se produce por algo completamente fortuito como una caída, y en otras por desconocimiento, errores o convertirse inesperadamente en el centro de atención, en el peor momento.
Pero no temáis, aquí hemos venido a aprender y por este motivo os queremos anunciar que si, que también se aprende a hacer el ridículo y por eso hemos escrito este artículo para que entendáis que nadie esta libre de pecado. Todos podemos hacer el ridículo en muchas ocasiones, lo importante es saber como afrontarlo y estar preparado para ello.
Podéis leerlo en el siguiente enlace que nos lo hemos currado mucho y siempre nos encanta que nos leáis.
El miedo a hacer el ridículo
Que tengas un buen día, si no tienes otros planes.
Escanea el QR y consigue mi libro Desdramatizar en la vida y en el trabajo.
Deja tu comentario